Confesiones

Confesiones

Jueves 19:00 hrs

durante la Hora Santa en Fátima

El sacramento de la reconciliación, llamado también confesión o penitencia, es una hermosa oportunidad para experimentar el amor misericordioso de Dios Padre.

Aunque sabemos que todas las personas son pecadoras, puede ser difícil reconocer nuestros propios pecados. A veces se necesita gran valor confesarlos pero, al hacerlo, experimentamos paz y dicha como resultado de la gracia de Dios.

El sacramento de la reconciliación nos concede el perdón y la sanación que necesitamos.

El perdón de nuestros pecados incluye cuatro partes que son:

  • El Acto de Contrición: Es un arrepentimiento sincero por haber ofendido a Dios y es el acto más importante de parte del penitente. No puede haber perdón de pecados si no nos arrepentimos y tenemos una firme decisión de no repetir nuestro pecado.
  • La Confesión: Confesar nuestros pecados con sinceridad a Dios que nos escucha por medio del  sacerdote.
  • La Penitencia: Una parte importante de nuestra sanación es la “penitencia” que el sacerdote impone para la reparación de nuestros pecados.
  • La Absolución: el sacerdote dice las palabras por las cuales “Dios, el Padre de la Misericordia” reconcilia a un pecador con Él mismo a través de los méritos de la Cruz.