En el evangelio de este domingo, descubrimos a Jesús que participa en las fiestas de su comunidad, que asiste con María, su madre, y sus discípulos a una boda. Una boda en la que todo se desarrolla bien hasta que falta el vino. Quizá los anfitriones hicieron mal el cálculo de los invitados… o de su capacidad de beber, pero en esa fiesta ya no hay vino. Así, el ánimo empieza a decaer, la situación se torna triste y penosa, los invitados se miran desconcertados, los que servían se reprochan… el ambiente se vuelve tenso, y todo porque se acabó el vino.
La Virgen María, que estaba en calidad de invitada, comparte la preocupación de los anfitriones: no quiere que la fiesta termine, ni que la alegría y el entusiasmo se disipen. Por eso se levanta de la mesa y le dice a Jesús, su Hijo: “Ya no tienen vino”. Y a los que servían: “Hagan lo que él les diga”.
El vino, ese fruto de la vid que es símbolo de la alegría de Dios, del entusiasmo, de la vitalidad exuberante… parece muchas veces agotado en nuestras vidas y mas en estos tiempos de pandemia, de inseguridad e impunidad. Cuando ponemos caras largas, cuando nuestra sonrisa se torna en mueca, cuando nuestra mirada es siempre de reproche, cuando sólo criticamos y no ponemos lo que está de nuestra parte para vivir en fiesta constante, nos volvemos como esas tinajas que ya no tienen ni una gota del generoso vino.
Jesús, impulsado por María, su madre, se compadece ante la penosa carencia en aquella boda; y dice a los que servían: “Llenen de agua esas tinajas”. Y he aquí el primer milagro de Jesús: la transformación del agua en un vino de calidad insuperable. Con este signo Jesús “manifestó su gloria y los discípulos creyeron en él”, y por supuesto, la fiesta continuó.
Hoy y siempre podemos decir con fe a Jesús: ¡Danos de tu vino, llénanos de la alegría del Evangelio, embriáganos de tu vida plena!¡quítanos la tristeza!
Dios todopoderoso y eterno, que gobiernas los cielos y la tierra, escucha las súplicas de tu pueblo y has que los días de nuestra vida transcurran en tu paz. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
DOS AÑOS
El pasado 14 de enero, un servidor que redacta la líneas del boletín, ha cumplido dos años de estar en esta querida parroquia de Nuestra Señora de Fátima. Han sido dos años difíciles dado la pandemia pero con muchas bendiciones y esperanzas. Doy gracias a Dios por esta oportunidad de servicio y pido me ayude para poder seguir sirviéndoles.
ORACION POR LA UNIDAD DE TODOS LOS CRISTIANOS
Del 18 al 25 de enero toda la Iglesia estará celebrando un octavario de oración para pedir a Dios el don de la unidad para toda la familia cristiana. Estamos divididos: católicos, ortodoxos, anglicanos, luteranos, calvinistas y toda la gama de evangélicos y cristianos. Les invitamos para que ofrezcan a Dios sus oraciones y sacrificios para que todos los que creemos en Jesús formemos un solo rebaño.
REUNION DE CATEQUISTAS
El miércoles 19 a las 12:00 hrs. habrá reunión general de catequistas. Les pido su asistencia y puntualidad porque programaremos todo lo referente a los sacramentos.
JUNTA DE CONSEJO PARROQUIAL
Ese mismo día a las 19:00 hrs. tendremos junta de Consejo Parroquial y a todos sus integrantes se les pide su presencia.
A EXTREMAR CUIDADOS
Dado que los contagios de covid se están incrementando en varios lugares se les pide observen las medidas preventivas sanitarias ya bastante conocidas.
SINODO DE LOS OBISPOS
Se han comenzado a dar los pasos para la celebración del Sínodo de los Obispos en el año 2013 cuyo tema será precisamente la “sinodalidad” en la Iglesia: comunión, partición y misión. Este sínodo ha sido convocado por el Papa Francisco y nos invita a participar de él.